Edgar Veci y Judith Rumbo escriben sobre el jueves: "nos
levantamos y después fuimos a desayunar. Más tarde, nos preparamos y nos fuimos de ruta al río Pisueña. Allí los guías, nos explicaron como se hacían las casas pasiegas y luego almorzamos en un
prado que se llamaba el campo de las mandarinas. Por la tarde después de comer tuvimos tiempo libre, y a continuación, hicimos un taller de especies invasoras y orientación en el que tuvimos que buscar
pistas por la finca del CEAm. El otro taller, era en inglés e hicimos un helado. Por
la noche tuvimos una fiesta después de cenar y luego nos
fuimos a dormir".